Muy codiciado entre coleccionistas, la calcosina es un mineral cuya composición tiene altos niveles de sulfuro de cobre. Pertenece al género de las piritas, incluida en la clasificación de metales sulfuros. En algunos casos, es posible que se confunda con la djurleita y solo a través de exhaustivos estudios de laboratorio se establezcan diferencias.
Aunque en la actualidad son términos en desuso, es común que a la calcosina se le llame también calcosita o calcocita. Sin embargo, el término proviene de la palabra griega chalkos, la cual se traduce como “cobre”, por ser mena de este metal tan reconocido.
La calcosina tiene gran importancia dentro del mundo de la mineralogía, aunque se menciona como mineral secundario. Su alto contenido de cobre, tiene mucho que ver, pues extraerlo con ayuda del azufre es un procedimiento bastante sencillo. Cada cristal relacionado con este elemento tiene gran costo en el mercado, sobre todo si está en buen estado.
Características de la Calcosina
Este popular mineral es producto de la alteración de otros elementos similares, sobre todo sulfuros de cobre, que se dan en las llamadas zonas de enriquecimiento supergénico. Entre estos se pueden mencionar: Covellita, Bornita y Calcopirita. Asimismo, existe la probabilidad de que forme pseudomorfos después de estos minerales.
La calcosina se distingue por poseer un color gris plomo, negro mate o con reflejos azules. Tiene aspecto de brillo terroso, similar a la cerámica sin esmalte. A menudo entra en la calificación de sectil y sus distintos cristales pequeños, tienen forma tubular o hexagonal. Por lo general, se agrupan en varias piezas similares, más que en uno solo.
No obstante, la calcosina también se presenta en agregados densos o en combinaciones con algunas partes más débiles, casi como copos de nieve. En otras imágenes se vislumbran gemelos de cristales doblados prismáticos. En algunos casos, se vincula con Chrysocolla, dando paso a una alteración alrededor de la pieza.
Suele ser considerada una mena importante de cobre y con frecuencia se halla en masas compactas o granulares. Cuando este mineral se expone al aire, puede perder algo de su brillo característico, poniéndose más oscura. Algunos ejemplares son muy pequeños y no tienen formas definidas.
Dónde encontrarla
Aunque la calcosina es un mineral secundario, se le considera de gran importancia debido a su alto contenido de cobre. Su localización en Europa es muy concurrida, así como en Cornwall, Inglaterra. Mientras que en Cornualles, específicamente en el área de Carn Brea, la mina Geevor, Levante y St. Ives se encuentran importantes yacimientos.
Otras dos localidades de África, como lo son Tsumeb, en Namibia y Shaba en el Congo, contienen importantes minas de calcosina. Incluso, recientemente fue descubierto otro espacio de este material en Asia, la cual está en proceso de explotación. Se encuentra en Dzhezkazgan, Kazajstán.
En la actualidad, han sido descubiertas nuevas formas de calcosina, con crecimientos ligeramente iridiscentes, que guardan similitud con las raíces. Estas se ubican en las minas Tongshan y Neijiang de China. Aquellas piezas de gran tamaño, con figuras prominentes habitualmente se consiguen en la mina Mammoth, Australia.
En Estados Unidos existen ejemplares considerados “ideales”, producto de las operaciones mineras que llevaban a cabo en Bristol, Connecticut. Otro sitio muy famoso por la calcosina es Butte, Montana. Entre los sitios más notables destacan las minas de Nuevo México, Arizona, y Nueva Jersey.
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