La palabra yacimiento proviene del latín ‘iacere’ que significa yacer. Es un término aplicado en geología para describir el lugar donde se encuentran, de forma natural, determinados grupos de rocas, minerales o gases. Los yacimientos se hallan en concentraciones mayores que en el resto de la corteza terrestre. La cantidad y calidad de los materiales determina su explotación o no para fines comerciales.
También se denomina yacimiento al sitio donde se localizan vestigios de civilizaciones pasadas, restos fósiles o de materiales, estructuras y restos medioambientales. Estos últimos han sido estudiados por la paleontología y la arqueología.
Se resumen tres tipos de yacimientos: geológicos, paleontológicos y arqueológicos. Los nombrados yacimientos petrolíferos pertenecen al primer grupo, almacenan hidrocarburos en especies de trampas geológicas.
Clasificación de yacimientos minerales
Por el origen, forma, tamaño, contenido mineral e impacto económico, los yacimientos minerales son clasificados en tres grandes grupos-
Según su forma y sustancia, pueden encontrarse yacimientos regulares (formados en capas y filones) e irregulares (constituidos en masas irregulares con marcados límites o impregnaciones). Igualmente, pueden estar clasificados en minerales de construcción, materiales industriales, piedras preciosas, combustibles, abrasivos y fertilizantes. Menas ferrosas o menas metálicas no ferrosas, en éste último están incluidos el oro y la plata
Según su genética, Lindgren, Niggli, Schneiderhohn y Smirnov han propuesto tablas de clasificación, basadas en el proceso geológico que dio origen a la concentración de minerales. Categorías que se definen por las condiciones ambientales en el tiempo y lugar de la deposición final. Y que varían según la región y las características termo- físicas donde se forman los minerales.
más de la categorización
Entre los criterios evaluados por Lindgren están los procesos químicos de concentración, diferenciación, desegregación magmática e inyección. Asimismo Introducción de sustancias extrañas a las rocas, la erupción de rocas ígneas y aguas calientes de origen incierto, emanaciones termales submarinas y reacciones inorgánicas, entre otros.
Smirnov por su parte los divide en yacimientos endógenos o magmáticos, exógenos o sedimentogénicos, y metamorfogénicos. Esto de acuerdo a los contextos litológicos y estructurales. En la serie endógena incluye los yacimientos magmáticos, pegmatiticos, carbonatitas, skarn, Albita-Greisen, hidrotermales y sulfuros masivos. En la serie exógena, a los de intemperismo, placer y sedimentarios. Y en la metamorfogenica, los yacimientos de minerales metamorfizados y metamórficos.
Según el tipo de yacimiento, se identifican depósitos masivos, depósitos estratiformes, vetas, cuerpos lenticulares, depósitos tabulares y de placer. Además según los materiales rocosos asociados pueden llamarse detritos, rocas fracturadas con diaclasas, extractos laminares o rocas masivas. Para determinar el tipo de yacimiento es relevante la información de su formación geológica, recientes hallazgos o exploraciones.
- Los depósitos masivos son aquellos de extensión horizontal y vertical predominante, en los que los minerales se diseminan de forma uniforme.
- Los depósitos estratiformes son paralelos a la estratificación de la roca huésped.
- Las vetas son yacimientos de gran longitud, angostas cuando son de menos de 3 metros, anchas cuando abarcan más de tres.
- Los cuerpos lenticulares o clavos son zonas de mineralización en forma de lentes, generalmente aisladas o alojadas en depósitos masivos o en vetas.
- Los depósitos tabulares o chimeneas tienen forma cilíndrica y se desarrollan con mayor prominencia de forma vertical.
- Depósitos de placer, ocupan grandes extensiones de la superficie o cercana a ésta. Son depósitos sedimentarios de oro, estaño o detritos, entre otros.
Otro grupo
Routhier (1916-2008) agrega además la clasificación de los yacimientos, según los caracteres propios del yacimiento y del medio que lo rodea. Entre las características propias están la paragénesis y eventual sucesión, la composición química, el peso y la relación de éste con las leyes. Del medio que lo rodea se toman apreciaciones de la naturaleza litológica de las rocas encajonantes, las rocas próximas y la edad del yacimiento.
Yacimiento paleontológico
En el lugar se conservan cantidades significativas de fósiles entre las rocas. Los yacimientos paleontológicos suelen aparecer entre rocas sedimentarias, y algunas veces en volcánicas.
Los yacimientos de origen sedimentario, marinos o de transición, adquieren características diferentes. En medios marinos los fósiles se dispersan por grandes extensiones. Mientras que en los sedimentos de origen continental se concentran pocas facies, en tramos irregulares y discontinuos. Un tipo de sedimento diferente es el de origen cárstico, que favorece la acumulación de los restos fósiles.
Los yacimientos paleontológicos de origen volcánico registran gran cantidad y variedad de mamíferos, aves, anfibios y reptiles que habitaron la tierra hace millones de años, en diversos períodos.
Yacimiento arqueológico
Llamado también zona o sitio arqueológico, concentra restos que denotan actividad humana, utensilios, materiales, estructuras, suelos ocupacionales u otras modificaciones medioambientales. Con la ayuda de prospecciones pueden encontrarse tanto en la superficie como enterrados.
Los yacimientos arqueológicos se forman por abandono, enterramiento o simple ocupación continuada. En ellos intervienen procesos físicos, biológicos y culturales. Se clasifican según la cronología, funcionalidad, ubicación topográfica y duración. La actividad en yacimientos arqueológicos se encuentra normada en la mayoría de los países, por lo que requiere de permisos especiales.
La prospección arqueológica es un método científico, destinado a la investigación, detección y estudio de vestigios tanto arqueológicos como paleontológicos.
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